Es un honor para este jurado premiar una realización que contiene virtudes, muy difíciles de encontrar juntas en una obra:

Construcción mediante tecnología local y de reducido costo, prolongación del espacio público hacia el interior, sensibilidad con las construcciones vecinas, control solar mediante elementos tradicionales, flexibilidad de usos y generación de recorridos y espacios arquitectónicos de gran variedad y calificación.

La secuencia espacial lograda, que recreando la tradicional casa con medio patio, logra una continuidad visual desde y hacia el fondo del clásico lote urbano, angosto y profundo.

La acertada ubicación del salón de reuniones, en el medio del lote, promete un recorrido que alternando el sol y la sombra, invita a un uso lúdico de los diferentes espacios abiertos y semicubiertos, permitiendo además una independencia funcional entre los mismos.

Estimamos que no será menor el impacto de la permeabilidad espacial, en los habitantes de Metan, y que promoverá el fortalecimiento de los vínculos entre la institución y la ciudad.

Nada más apropiado para esta, la casa de los abogados de Metan, que citar a Borges cuando dice “el patio es el lugar por donde el cielo se derrama en la casa”, cielo salteño que desde ese patio, se verá más intenso aún.