Se recicló la vivienda original, de 1914, para un matrimonio de médicos con tres hijos jóvenes, que residían en el Gran Buenos Aires en una casa amplia con jardín y pileta. A fin de incorporar el verde en la nueva vivienda, se transformó el patio original, de exiguas dimensiones y mal asoleado, en una secuencia de patios desarrollados en el espacio y calculados para recibir sol en las distintas épocas del año. Cada uno de los ambientes principales de la casa tiene acceso a alguno de estos patios. Además, la cubierta se transformó en terraza accesible al descubrir debajo de la chapa una estructura de viguetones premoldeados importados de Francia en 1914.

en esta intervención en una casa patio en esquina, se ponderó el crecimiento incorporando entrepisos dentro de la cáscara original, con pequeños ajustes en las aberturas de fachada para adaptarse al nuevo corte, y el rescate del patio como corazón de la casa. Se valoró también la adopción de criterios sanos de aprovechamiento del sol y la traducción de los principios teóricos que sustentan la propuesta, como la decisión de mantener la caja interior descartando crecimientos que pudieran romper la armonía urbana existente.